Guía de Italia: Qué hacer y dónde alojarse

Con sus pueblos medievales, su arte renacentista, paisajes que dejan sin respiración y grandes centros culturales como Florencia, Venecia y Roma, Italia se ha ganado a pulso el sobrenombre de bel paese (“país hermoso”). Toda esa cultura está envuelta en miles de kilómetros de playas y salpicada con la mejor comida del mundo.

Los mejores lugares que visitar en Italia

Roma

El foro de Roma es uno de los lugares públicos de reunión más importantes de la historia (Foto: Getty Images)

Roma es una asombrosa mezcla de épocas y culturas, con calles repletas de antiguas ruinas romanas (¡no solo están el Coliseo y el Foro!) donde también abundan las murallas medievales, los palacios renacentistas, lujosas fuentes barrocas, plazas e increíbles iglesias. Además está, por supuesto, el Vaticano, un diminuto estado dentro de un país. Todo ello se extiende en torno al río Tíber, uno de los más navegables de Europa. Quédese en la Via Veneto si quiere experimentar la Dolce Vita (la película se rodó aquí) y alójese en el Rome Marriot Grand Hotel Flora.

Venecia

No hay ninguna ciudad como Venecia (Foto: Getty Images)

Venecia es única, con los mismos mercados, bares y oficios artesanales que había en la época medieval. No solo destaca por las islas de la laguna, sino también por el arte de nivel mundial que sigue ocupando un lugar de honor en las iglesias y no en los museos, por las esbeltas torres de campanarios (a menudo escalables), las playas del Lido, los transbordadores que recorren el centro, las góndolas que navegan por el Gran Canal... todo muestra un encanto infinito. Tómese su tiempo para explorar la ciudad y alójese en uno de los excelentes hoteles Marriott, como el JW Marriott Venice Resort & Spa o el asombroso The Gritti Palace, a Luxury Collection Hotel, Venice.

Milán

El Duomo (catedral) de Milán tardó 600 años en construirse (Foto: Getty Images)

Milán, otrora descartada como simple centro de negocios con un ritmo de vida acelerado, se halla ahora repleta de visitantes que acuden a ver La última cena de Da Vinci en la pared del convento de Santa Maria delle Grazie; la Sala delle Asse del castillo Sforzesco, que el mismo artista decoró con el trampantojo de un bosque; su Códice Atlántico, conservado en la Pinacoteca Ambrosiana; y los canales Navigli, que son el centro de la vida nocturna de la ciudad. Desde el empedrado y artístico barrio de Brera hasta hasta el intrincado Duomo, la segunda iglesia más grande de Europa, hay mucho que ver, y además puede desplazarse en tranvías de época. Experimente la ciudad alojándose en uno de sus principales hoteles, como el Excelsior Hotel Gallia, a Luxury Collection Hotel, Milan. Desde aquí puede hacer excursiones para visitar los lagos de Italia (el Como, el Maggiore y el Iseo), o si lo prefiere, pernoctar en el Sheraton Lake Como Hotel.

La Toscana

Los paisajes de La Toscana le dejarán sin respiración (Foto: Getty Images)

Hogar de la zona vinícola del Chianti, de algunas de las mejores playas del Mediterráneo y de pueblos  de incomparable belleza en las colinas, la ciudad más grande de la Toscana, Florencia, fue la cuna del Renacimiento. Incluso ahora, pasar por delante de sus palazzos para visitar elegantes iglesias de mármol rayado y piazzas salpicadas de estatuas le hará retroceder en el tiempo. Su colección de museos y galerías no tiene parangón: la galería Uffizi alberga la Venus de Botticelli, el Bargello está repleto de Donatellos y el museo de la catedral acoge obras de Michelangelo.

También le gustará contemplar el arte de los antiguos rivales de Florencia, Siena y Pisa, visitar la famosa torre inclinada y detenerse a comer en Panzano, reconocido por su gastronomía. Si lo que le gusta es el ciclismo, le encantarán las strade bianche ("caminos blancos" o pistas de grava) que atraviesan el famoso paisaje del Val d’Orcia. Alójese en el nuevo Grotta Giusti Thermal Spa Resort Tuscany, Autograph Collection para experimentar los famosos spas termales de la Toscana o pase la noche en lo alto de una colina, en el asombroso Renaissance Tuscany II Ciocco Resort & Spa.

Cerdeña

Las playas de Cerdeña son bellísimas (Foto: Getty Images)

Es uno de los mejores destinos de playa de Europa, salpicado de excelentes resorts como el Hotel Cala di Volpe, a Luxury Collection Hotel, Costa Smeralda, situado a un paso de las playas de Costa Esmeralda, pero Cerdeña tiene mucho más que su costa, de indudable belleza.

La vida siempre ha tenido lugar en la entroterra o parte interior de la isla, por lo que si se dirige al interior encontrará buena comida y se sentirá como en casa. Para conocer lo mejor de los miles de yacimientos arqueológicos de Cerdeña, vaya hacia Barumini, donde se encuentra el poblado prehistórico de Su Nuraxi, que aún se conserva intacto.

Qué comer y beber en Italia

Pizza

La pizza de Nápoles es la mejor del mundo (Foto: Getty Images)

Posiblemente la aportación más famosa de Italia para el mundo, la auténtica pizza italiana está muy por encima de la que posiblemente come en casa. Existen dos escuelas principales: la napolitana original, que es más blanda, con ingredientes más tradicionales y se hornea en unos segundos; y la romana, más fina y crujiente. Fuera de esas dos ciudades hay grandes lugares para comer en todas partes. La mayoría de las pizzerías ofrecerán algo a camino entre ambas, a menudo con ingredientes regionales como anchoas o el típico radicchio veneciano.

Pasta

La pasta rellena, como estos tortellini, es uno de los mayores placeres del mundo (Foto: Getty Images)

Italia se alimenta de pasta y, aunque la encontrará en todo el país, la que goza de mayor prestigio es la de la región de Emilia Romagna. Aquí, los sfogline (fabricantes de pasta tradicionales) extienden la pasta fresca al huevo a mano; en el sur se prefiere la pasta seca. En Bolonia, la ciudad más grande de Emilia Romagna, se intenta incluir en los platos tortellini (pequeños trocitos de pasta rellenos de carne) en caldo de capón, una receta que data de la Edad Media, y tagliatelle al ragù, la salsa con mucho tomate cocinada a fuego lento que hemos traducido como "espagueti boloñesa".

Risotto

Como uno de los principales centros productores de arroz, tradicionalmente el norte de Italia ha preferido el risotto a la pasta. El risotto alla milanese, de un intenso color amarillo gracias al azafrán y cocinado con vino blanco, queso parmesano y mantequilla, es la introducción clásica al arroz italiano. En Milán, su ciudad de origen, pruébelo en el Ratanà, un cine convertido, con un trozo de médula ósea.

Cicchetti

Cuando visite Italia, pruebe distintos cicchetti (Foto: Getty Images)

En Venecia puede comer a base de pinchos. Ciudad reconocida a través de los tiempos por su gente trabajadora y buena bebedora, fue allí donde se crearon los cicchetti, unos snacks contundentes y ricos en proteína que compensan el alcohol y calman el apetito. Desde huevos duros con anchoas hasta delicadas porciones de pan con queso, carnes y verduras, la lista es infinita. Encontrará algunos de los mejores en Cantinone già Schiavi, donde estos aperitivos son tan delicados que hasta se espolvorean con pétalos de flores.

Las mejores cosas que hacer en Italia

El icónico Coliseo de Roma (Foto: Getty Images)

La mayoría de las cosas que no se puede perder en Italia tienen que ver con la cultura. En Roma es imprescindible realizar una visita al Coliseo, especialmente para ver las zonas subterráneas en que solían esperar los gladiadores. El ticket incluye entradas para el Foro y para el Monte Palatino, desde cuya terraza se obtienen las mejores vistas del Foro. Otro de los imprescindibles de la ciudad es el Vaticano, así que deje tiempo suficiente para disfrutar de sus enormes museos y termine con una visita a la obra maestra de Michelangelo, la Capilla Sixtina.

En Florencia, explore la época renacentista visitando sus galerías y museos. No se pierda los extensos jardines de Boboli (con terrenos espectaculares) y Bardini (que ofrece unas incomparables vistas sobre la ciudad), y asegúrese de alojarse en una habitación con vistas al Arno en The St. Regis Florence.

En Venecia, recorra el Gran Canal en vaporetto (bus acuático) y pase bajo el famoso Puente de Rialto antes de llegar a la Plaza de San Marcos, donde encontrará una basílica bizantina y elegantes cafés (Quadri es un buen ejemplo).

Si le sobra tiempo, quédese un día en la acogedora Bolonia, que alberga la universidad más antigua del mundo, para disfrutar de la mejor comida del viaje. Asegúrese de explorar el distrito de Quadrilatero, repleto de tiendas de alimentación y bares desde la Edad Media. Desde Nápoles, viaje hasta las ruinas de Pompeya (quédate en Renaissance Naples Hotel Mediterraneo) o recorra en coche la Costa Amalfitana.

Joyas ocultas de Italia

Burano es una isla de la laguna veneciana (Foto: Getty Images)

La mayoría de turistas no se queda mucho tiempo en Venecia, lo que significa que hay lugares con menos afluencia de gente. Si quiere un plan alternativo, empiece por la Scuola Grande di San Rocco, un enorme edificio casi completamente cubierto de obras de Tintoretto, el pintor renacentista más famoso de la ciudad. Aunque muchos turistas optan por ir hasta Burano en barco, la mayoría se limita a sacar unas fotos de las casas de colores y marcharse.

Quédese y pase allí la tarde: coma tranquilamente en el restaurante Gatto Nero, que cuenta con clientes como Tom Cruise y George Clooney, y a continuación tome el transbordador hasta la vecina isla deshabitada de Torcello, que acoge dos iglesias antiguas en medio del campo, una de ellas con mosaicos bizantinos que le dejarán sin respiración. ¡Y no se pierda las playas de La Toscana! Aunque las más famosas se encuentran alrededor de Pisa (Viareggio es conocida por su suave arena), diríjase hacia el sur, hacia la zona de Grosseto, y podrá ver arenales en mitad de parques nacionales. Marina di Alberese es imprescindible.

Profundice

A menos que vaya a quedarse en el campo o a disfrutar de un viaje por carretera, realmente no hace falta alquilar un coche. Italia cuenta con una red ferroviaria excepcional y los trenes de alta velocidad Frecce e Italo le llevarán por todo el país mucho más rápido que si fuera en coche, y además con mucho menos estrés.

Algo que debe saber a la hora de viajar por las distintas regiones es que Italia se centra mucho en lo local y en cada pueblo se habla un dialecto diferente. Esto se manifiesta también en la comida, así que en vez de pedir lo mismo en todas partes, atrévase a probar los platos tradicionales de cada lugar. En Venecia, por ejemplo, escoja pescado en vez de pasta o pizza o, si no está seguro, pida un piatto tipico (un plato tradicional).

Publicado: Noviembre 30, 2022

Última actualización: Diciembre 13, 2023