Guía de Barcelona: qué hacer y dónde alojarse

Los caprichosos diseños de Gaudí dominan las atracciones más destacadas de Barcelona, pero hay mucho más por descubrir escondido en el estrecho laberinto de calles del Barrio Gótico, a lo largo de los amplios bulevares del Eixample o en la colina de Montjuïc. El ambiente multicultural de la ciudad, su ubicación costera y la cultura catalana significan que siempre hay algún tipo de festival y mucho que ver, sin importar en qué época del año la visite.

Los mejores barrios que visitar en Barcelona

Barrio Gótico

La Boquería es uno de los magníficos mercados cubiertos de Barcelona (Foto: Getty Images)

Ubicado entre el antiguo puerto y la zona moderna, el Barrio Gótico es parte de la Ciudad Vieja de Barcelona y está lleno de tesoros antiguos y grandes edificios históricos. En su corazón se encuentra la Catedral, ​​rodeada por una red de estrechas calles y un entramado de curiosas tiendas, algunas de las cuales han permanecido intactas durante más de un siglo. Entre la amplia gama de lugares para visitar se encuentran el MUHBA (Museo de Historia), el Museo de la Catedral o el Frederic Marès, que conserva las colecciones repletas de rarezas que reunió su fundador.

Otras actividades interesantes incluyen una visita a la impresionante Plaza de San Jaime, sede del palacio del gobierno catalán y del Ayuntamiento, o la pintoresca Plaza Real, con soportales y presidida por la Fuente de las Tres Gracias, obra de Antoine Durenne. 

Por supuesto, un paseo por la calle más famosa de Barcelona: La Rambla es casi obligatorio. Visite el célebre mercado de La Boquería para comprar algunos productos locales y, en el camino, deténgase para admirar el Gran Teatro del Liceo, uno de los escenarios de ópera más importantes del mundo.

El Born

El Born destaca por una gran vida nocturna y lugares para comer (Foto: Getty Images)

Situado al sur, haciendo frontera con el parque de la Ciutadella a un lado, el Barrio Gótico y el antiguo puerto, atrae a una mezcla de jóvenes trabajadores, residentes extranjeros y turistas. Un ecléctico conjunto de bares, cafeterías y restaurantes de moda se alinean en sus calles adoquinadas alrededor de la elegante iglesia de Santa María del Mar, mientras que el cercano laberinto de estrechas callejuelas alberga una gran variedad de encantadoras boutiques y pequeñas galerías. Además de una animada vida nocturna y la excelente variedad de lugares para comer, los principales atractivos de El Born son el Museo Picasso, el Palau de la Música, declarado Patrimonio de la Humanidad por la Unesco, y el vibrante Mercado de Santa Caterina.

Justo antes del almuerzo, haga una pausa para disfrutar de la hora del vermut en uno de los muchos bares de este distrito. Luego, diríjase al restaurante The Roof, en el hotel The Barcelona EDITION, que ofrece comidas de estilo mediterráneo al aire libre y envidiables vistas.

Eixample

La clase alta de la ciudad, turistas y profesionales se mezclan en el barrio del Eixample (Foto: Getty Images)

La clase alta catalana, turistas y profesionales se mezclan a lo largo de los amplios bulevares del barrio del Eixample, una amalgama de tiendas de grandes firmas, edificios modernistas y elegantes restaurantes. Situado en el centro de Barcelona, ​​es uno de los mejores lugares para alojarse. Decídase por el refinado Sir Victor Hotel, a member of Design Hotels™️, ubicado a solo dos minutos a pie de uno de los principales diseños de Gaudí: La Pedrera, o el espléndido Cotton House Hotel, Autograph Collection, cerca del centro, en Plaza de Cataluña.

Dividido en L'Eixample Esquerra (lado izquierdo) y L'Eixample Dreta (lado derecho), está atravesado por el gran Paseo de Gracia. Es aquí, junto a las tiendas de diseño, donde encontrará otro de los principales atractivos de Barcelona: la iridiscente Casa Batlló, también de Gaudí. Otras alternativas igual de interesantes son visitar la Casa Amatller, de estilo modernista catalán y conocida por su chocolate, o la Casa de les Punxes, donde podrá conocer la leyenda del patrón de Cataluña, Sant Jordi.

El lado derecho del barrio también alberga la mayor atracción de la Ciudad Condal: la Sagrada Familia de Gaudí, que ha estado en construcción durante más de un siglo. Otra cosa única que hacer en el vecindario es subir al increíble Recinto Modernista de Sant Pau, antiguo hospital y el complejo de edificios modernistas más grande del mundo.

El Eixample cuenta con una gran variedad de buenos lugares para comer. Si le resulta difícil decidirse por uno, no le decepcionará El Nacional, un distinguido restaurante que alberga cuatro comedores diferentes y cuatro barras con una selección de los mejores platos españoles y catalanes.

Gràcia

El Park Güell es uno de los espacios verdes más grandes de Barcelona (Foto: Getty Images)

Con una combinación de estilos hípster, bohemio y ambiente local catalán, Gràcia tiene su propia personalidad. Situada al norte, comprende una serie de animadas plazas conectadas a través de estrechas callejuelas. Hay una larga lista de excelentes lugares para comer aquí, desde restaurantes internacionales y locales típicos catalanes hasta excelentes bares de tapas y acogedores cafés.

Durante el día, es un gran lugar para comprar artículos únicos y artesanías elaboradas a mano. Por la noche, sus plazas cobran vida con los estudiantes y jóvenes profesionales que disfrutan de las múltiples coctelerías y opciones de ocio nocturno del barrio. Además de ser un gran centro de reunión, sus principales atractivos son los diseñados por Antoni Gaudí. A un lado, se encuentra la primera casa que proyectó, Casa Vicens, con sus torreones y fachada de azulejos brillantes. Al norte, aguardan los empinados senderos que llevan al Park Güell, con su famoso banco de trencadís, casas que parecen pan de jengibre y palmeras talladas en piedra.

Poblenou

Lugareños de todas las edades componen la población de este barrio, con una mezcla inusual de mujeres mayores, hípsters aficionados al café y empleados de empresas emergentes. Ubicada al suroeste, junto a la playa, se compone de una mitad inferior tradicional catalana y una mitad superior moderna y flamante. Al sur, estilosos edificios modernistas y restaurantes bordean la Rambla del barrio; al norte, el distrito 22 está repleto de antiguas fábricas convertidas en escuelas de diseño, centros tecnológicos y cervecerías artesanales.

Poblenou es un gran lugar para pasear, buscar algo de comer y, después, ir a la playa. Almuerce tortitas de kimchi o tostadas de aguacate en Little Fern, pruebe algunas de las mejores croquetas de la ciudad en Catacroquet y termine con un café en Nomad Roaster’s Home. Si desea establecer su base en este emergente vecindario, el hotel Four Points by Sheraton Barcelona Diagonal es una excelente opción.

Barceloneta

El W Barcelona ofrece una combinación de lujo y confort en cada una de sus habitaciones y suites (Foto: Getty Images)

Justo detrás del paseo marítimo, la Barceloneta es el antiguo barrio de pescadores. Hoy, acoge un batiburrillo de lugareños y turistas atraídos por sus clásicos bares de tapas, restaurantes tradicionales y cenas frente al mar. Aunque la mayoría de gente lo atraviesa de paso para llegar a la playa, merece la pena explorar sus angostas calles para admirar su arquitectura tradicional, el mercado central y la iglesia de Sant Miquel del Port, de estilo barroco.

Pase la tarde relajándose junto al agua, luego, pruebe una de las mejores paellas de la ciudad en Can Solé, o diríjase al icónico hotel W Barcelona para cenar marisco fresco cocinado por el reconocido chef Carles Abellán. Cuando se ponga el sol, diríjase al salón de cócteles Eclipse, con vistas espectaculares.

Plaza de España y Montjuïc

Al oeste, se alza la enorme montaña de Montjuïc, con parques, jardines y frondosas arboledas. Para llegar hasta allí, tome las escaleras mecánicas desde Plaza de España hasta el palacio neobarroco que alberga el Museo Nacional de Arte de Cataluña (MNAC), pasando por cascadas y fuentes resplandecientes. La plataforma en la parte superior ofrece una de las mejores panorámicas de toda Barcelona.

Además de disfrutar del paisaje, hay varias cosas divertidas que hacer aquí, desde nadar en piscinas olímpicas hasta paseos en teleférico. También hay otro buen puñado de museos, como la Fundació Joan Miró, el Museo Olímpico y del Deporte, el Museo Catalán de Arqueología y Poble Espanyol, que exhibe estilos arquitectónicos y artesanías de toda España. Fácilmente, podría pasar varios días aquí y no alcanzar a visitarlos todos. Otros lugares de interés incluyen el impresionante Estadio Olímpico, el Jardín Botánico y el Castillo de Montjuïc, ubicado justo en la cima de la colina.

Las opciones gastronómicas son pocas y distantes entre sí, pero hay muchos lugares excelentes para hacer un pícnic. Recuerde llevar algo de comida del centro comercial Las Arenas, en Plaza de España, ubicado dentro de una antigua plaza de toros.

Profundice en la cultura catalana

La icónica fuente y columnas de las Plaza de España de Barcelona (Foto: Getty Images)

Está en Cataluña, así que impresione a los lugareños aprendiendo algunas frases en catalán. Use “bon dia” para saludar a la gente y “adéu” para despedirse. A la hora de salir a cenar, puede preguntar: “¿teniu una taula per dos?” (¿tienen mesa para dos?) o “la carta, si us plau” (el menú, por favor).

Moverse por Barcelona es sencillo con el billete de transporte TMB T-Casual, que incluye diez viajes para utilizar en metro, autobuses, tranvías o Rodalies (red de trenes urbanos). También cuenta con un excelente sistema de transporte regional, lo que hace que viajar fuera de la ciudad sea muy fácil. Conduzca hasta la pintoresca Costa Brava para buscar calas idílicas y playas escondidas, ideales para nadar, bucear y navegar en kayak.

Publicado: Noviembre 15, 2022